Estuvieron todos.
No falto ni uno solo. Estuvieron 35
mil hinchas en las tribunas, una
multitud, para reflejar lo que es
San Lorenzo: una inmensa pasión
popular sin limites, nacida en un
barrio y extendida a un País, puro
color, puro apoyo, puro corazón,
pura fe.
Estuvieron los
principales protagonistas de una
historia que acaba de cumplir nada
menos que 100 años. Estuvieron
aquellos que vestidos de azulgrana
gritaron goles, dibujaron fantasías,
transpiraron esfuerzos, volaron
hasta los ángulos para evitar
tropiezos, idearon estrategias para
crecer como equipo y también como
club.
Estuvieron
también los que se fueron de la
Tierra para alentar desde el cielo,
esos cuervos sagrados, simbolizados
ayer aquí abajo, en el corazón de la
popular mas caliente. Ahí estaba el
Padre Lorenzo Massa, el que puso la
primera piedra, el fundador de San
Lorenzo, tallado en madera...
Fue vivir 100
años gloriosos en una noche. Todo en
una noche. Las vueltas olímpicas.
Los golpes. Los ídolos. El Viejo
Gasómetro. El Nuevo Gasómetro. San
Lorenzo es ese coctel de imágenes en
blanco y negro. El primer campeón,
el del 33. El del 46 que hasta se
dio el lujo de asombrar en Europa.
San Lorenzo es Sanfilippo, goleador
del campeón del 59, contándole a la
gente como practicaba en arcos de 40
centímetros por 40 centímetros.
San Lorenzo es el
tucumano Rafael Albretch llorando
mientras se muestran perlas de los
inolvidables Matadores del 68. San
Lorenzo es el León Esposito,
bicampeón del '72 e integrante del
campeón '74, sacado al ver las
imágenes de su epoca, parado sobre
la silla y arengando a la gente para
que cante y cante sin parar.
San Lorenzo es la Chancha Rinaldi
hablándole a los hinchas a traves de
un video, analítico, lejos de aquel
Rinaldi explosivo y líder futbolero
del equipo que lleno todas las
canchas en el año del ascenso, en el
'82.
San Lorenzo es Pablo Michelini, el
sudor del San Lorenzo 2001 de Manuel
Pellegrini, el de la vuelta olímpica
y de los 13 triunfos consecutivos.
San Lorenzo es Alberto Acosta, el
gol en las dos coronaciones
internacionales en la Mercosur y en la Sudamericana
conducida por Rubén Insua, otro
símbolo azulgrana como jugador y
también como técnico.
San Lorenzo es mucho mas que el show
de anoche. Es mucho m s que la buena
combinaciónn de la historia con los
diversos temas musicales, cuyas
letras ‚poca distinta. Es mucho m s
que el hincha m s famoso, Viggo
Mortensen, celebre actor de "El
Señor de los Anillos". Es mucho m s
que Trelles, Valeria Linch, Cacho
Castaña, Marcela Morelo, Abel
Pintos, Chiqui Pereira, David Lebon,
Baglietto y Víctor Heredia.
San Lorenzo se resume en el instante
m s emotivo de la noche del
miércoles en el Bajo Flores. San
Lorenzo es lo que contagia el
Bambino Veira, el símbolo de los
Carasucias de principios de los '60,
el que jugo poco en los Matadores,
el técnico del equipo que en 1995
corto una racha sin títulos de 21
años.
San Lorenzo es
ese hombre que entra caminando por
el escenario. Que le habla a los
hinchas. Que es escuchado con máxima
atención por la gente. Que genera al
mismo tiempo una sonrisa grandiosa,
pero que también lloro. San Lorenzo
supera cualquier show porque es un
amor eterno. Por algo ya cumplió 100
años.
Por Fernando Gourovich |