El solo hecho de ver en la pantalla gigante del Air Canada Centre, enfrentados, a Toronto Raptors y a San Lorenzo de Almagro, ya generaba un cosquilleo. Finalmente, un equipo argentino participaba de la pretemporada de la NBA, un objetivo cumplido. Lo importante no era el resultado sino estar ahí, pero obviamente cuando la pelota fue al aire, todas las vivencias, la experiencia única y demás quedaron a un costado para que los argentinos hicieran lo que mejor saben hacer: competir. Así lo hizo todo el juego, aunque la victoria fue para los Raptors 122-105, con 31 puntos de Vanvleet. En San Lorenzo, Meyinsse sumó 20, Mata 18, Aguirre 17 y Deck 16. Toronto, por lógica, utilizó un plantel suplente, ya que todavía le resta definir un jugador para su roster de 15, por lo que tuvieron muchos minutos los que pelear por ese puesto. San Lorenzo tardó un par de minutos en acomodarse (0-4), pero Deck hizo dos apariciones seguidas (una, un volcadón), Aguirre clavó un triple y de golpe se vio 3 arriba (8-5). Los Raptors empezaron a pesar en la pintura con Siakam y Nogueira, pero no podían despegarse en el tanteador. Lamas rotó el equipo temprano y tuvo una excelente incursión de Calfani con su tiro de 3 puntos. Una bomba del uruguayo le dio a los de Boedo un liderazgo de 19-18, pero ahí llegó el peor momento de la visita. Atacó mal, erró mucho (no podía tirar cerca del cesto) y Toronto, corriendo y aprovechando algunas pérdidas, puso un parcial de 14-0 para irse 13 arriba. Parecía que lo quebraba, pero tras llevarse 32-22 el primer cuarto, otra vez con sus principales hombres en cancha (Aguirre, Deck, Mata), los cuervos jugaron 10 minutos fantásticos, dando vuelta el juego con la puntería del Penka (4/5 triples hasta ahí), más el aporte de Calfani y dos triplazos de Mata. Además, mejoró muchísimo atrás, impidiendo las penetraciones fáciles con descargas, y luchando cada rebote. Así, se fue al descanso largo al frente 55-53, con una soberbia actuación de Aguirre: 15 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias. Deck, con 11 y Calfani, con 10, eran los otros líderes ofensivos. La segunda mitad fue distinta. Powell con su potencia y VanVleet con su capacidad anotadora, más Siakam en su regreso, le dieron más variantes a la ofensiva local que, como era de esperar, con el tiempo fue encontrando más espacios. Además de ser NBA, tienen mayor cantidad de jugadores, y menos desgaste, a pesar de haber dejado afuera a sus cracks todo el partido. VanVleet fue una pesadilla con sus penetraciones y tiro, Siakam dominó la pintura y, encima, apareció la mano de Singler. Toronto se fue arriba por 9 (77-68), pero San Lorenzo no se entregó. Doble de Deck, bomba de Scala y otra vez en juego (77-73). El juego, de todos modos, ya no era tan parejo. A San Lorenzo todo le costaba un poco más y dependía de su tiro de tres puntos, que por suerte funcionó muy bien en general. Cerca del cesto prácticamente no pudo anotar, salvo excepcionalmente Meyinsse. Si bien el tercer cuarto terminó otra vez con San Lorenzo en partido (87-82), había desigualdades que ya no se podían disimular. En el último período, eso quedó más claro. Los Raptors siguieron corriendo, moviendo la bola, encontrando buenos tiros, y San Lorenzo bajó su efectividad, algo esperable luego del tremendo porcentaje de los primeros 24 minutos. Fue para los Raptors 122-105 con un intratable VanVleet (31 puntos). San Lorenzo hizo un gran papel, en el que se repartieron responsabilidades Deck (16), Aguirre (17), Mata (18) y Meyinsse (20). Buenos ingresos también de Scala (13) y Calfani (10). Lo importante, igual, estuvo en el camino.